Beatriz va por el DF

PAULINO CÁRDENAS

Si Enrique Peña Nieto y Beatriz Paredes Rangel ganan, uno la Presidencia de la República, y otra el Distrito Federal, el poder del país entero volverá de hecho, para bien o para mal, a manos del PRI. Habría que decir que ella, desde que en 2006 aspiró a ser jefa de gobierno y quedó en tercer lugar frente a Marcelo Ebrard y Demetrio Sodi, no pensaba bien a bien volver a intentarlo, aunque en su fuero interno seguía latente el anhelo. Fue hasta que el ex mandatario mexiquense pronunció su nombre como la mejor para contender por la capital del país, que le latió fuerte el corazón. Aunque algo ya sabría de antemano la noticia la tomó por sorpresa.

El virtual ‘destape’ fue el 25 de septiembre pasado, en el contexto del quinto informe de labores del ex perredista –ahora senador por el Partido Verde Ecologista de México (PVEM)– René Arce, cuando en entrevista el ex gobernador del estado de México aseguró que si ella aceptaba participar en la contienda por la jefatura del Distrito Federal, él la respaldaría. Esto lo mencionó minutos después de que Arce había expresado su apoyo a las aspiraciones del político mexiquense en su candidatura presidencial.

Al concluir el acto, se le preguntó a Peña Nieto a quién preferiría para el GDF, si a Arce o a Paredes, y comentó que aunque había que escuchar los pronunciamientos que hicieran quienes aspiraban a la jefatura, “es claro que mi identificación es con Beatriz Paredes. Es correligionaria, es mi amiga, y habrá que escuchar pronto si hay definición por parte de ella por participar, y de ser así, pues evidentemente tendrá todo mi respaldo y todo mi apoyo y toda mi simpatía”.

En una de sus primeras declaraciones sobre el pronunciamiento que hizo sobre ella el precandidato único del PRI a la Presidencia de la República, la ex legisladora indicó que la ciudad de México requiere una alternancia en la forma de gobernar y que es hora de un cambio en el que se escuche a todos los habitantes de la megametrópoli mexicana.

Muchos dan por hecho que Paredes Rangel podría recuperar el último bastión que le queda al PRD –el cual ha tenido bajo su mando desde 1997–, debido en gran parte a que muchos capitalinos están hartos de los gobiernos demagógicos y autoritarios con los que ha manejado la ciudad de México, sin desdoro de la larguísima experiencia que tiene en su amplia carrera política la ex diputada.

Ni juntos, sus otros dos contrincantes –Miguel Angel Mancera, ex procurador capitalino que representará a las izquiedas capitalinas, y la activista Isabel Miranda de Wallace designada por ‘dedazo’ por la cúpula del PAN que se maneja desde Los Pinos–, le llega a los tobillos a la virtual candidata única al gobierno del Distrito Federal.

La ex gobernadora de Tlaxcala ha sido senadora y diputada federal y local en varias ocasiones; presidenta nacional de su partido; subsecretaria de Gobernación y Reforma Agraria; lideresa de la CNC y embajadora de México en Brasil y Cuba, entre otros cargos. Presidió el Congreso en tres ocasiones, 1979, 2001 y 2002; la Cámara de Diputados en la LIII Legislatura, y el Senado en la LVII.

Por sus pugnas internas, el PRD acabó eligiendo al ex procurador Mancera, quien no es perredista ni pertenece a ninguno de los otros partidos de izquierda a los que representará en la contienda para suceder a su jefe en julio próximo. Además,su experiencia administrativa es reciente como lo señaló Beatriz Paredes. “Lo que conoce es su materia (la procuración de justicia), porque tiene muy poco de haberse incorporado a la función pública”, resaltó.

Sobre la señora Miranda de Wallace, la ex gobernadora de Tlaxcala sostuvo que “el PAN tomó una decisión y seguramente los militantes activos de ese partido deben haberse sorprendido, pero es una decisión de ellos y no la juzgo”. Dijo que “el Distrito Federal merece capacidad, experiencia y honradez, y nosotros tenemos todo eso”. La ex legisladora se avocó de inmediato a armar su equipo con el que podría arrebatarle al PRD su útimo bastión de donde se provee no sólo de votos sino los recursos económicos de las campañas de los jefes de gobierno.

La penúltima columna que sostenía al perredismo era Michoacán, pero el pasado viernes 20 de enero el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación avaló la legitimidad de la elección de gobernador de ese estado celebrada el domingo 13 de noviembre pasado, y ratificó el triunfo del priísta Fausto Vallejo Figueroa.

Por lo pronto, Beatriz Paredes habrá de demostrar que, aún sin infraestructura ni las redes de complicidad que ha ido desde hace tres lustros tras el dinero en el DF, el PRI puede lograr el triunfo para el tricolor. Y si a la par gana Peña Nieto la Presidencia en julio próximo, México quedaría de hecho en poder cuasi absoluto del Partido Revolucionario Institucional, para bien o para mal.

pcardenascruz@yahoo.com.mx

Otro revés a Calderón

PAULINO CÁRDENAS

Aparte del inesperado golpe de haber perdido a su amigo Francisco Blake Mora en el fatídico helicopterazo del viernes, en el ámbito político el presidente Felipe Calderón sufrió otro revés este domingo con la derrota de su partido en los comicios de Michoacán, en donde su hermana Luisa María era la candidata del albiazul para la gubernatura de ese estado y que perdió pese a haber tenido consigo durante su campaña todo el apoyo del aparato presidencial y del gabinete calderonista, en una jornada que resultó más concurrida de lo esperado.

La ventaja que llevaba ayer al cierre del cómputo de los sufragios Fausto Vallejo, candidato del PRI-Partido Verde, aunque la podrán impugnar los panistas y perredistas en los tribunales electorales de esa entidad, el triunfo de quien hasta en cuatro ocasiones ha sido presidente municipal de Morelia, es de hecho irreversible. El PRI en alianza no sólo habría ganado la gubernatura, sino más de un tercio de los 113 municipios michoacanos, además de que tendría mayoría en el Congreso local.

Además de dejar en el camino a la hermana del Presidente, la virtual victoria del priísta habría echado por la borda también los anhelos de Silvano Aureoles, del PRD-PT-Convergencia, con lo que la izquierda habría perdido la jettatura de doce años consecutivos al frente del gobierno de Michoacán, que primero tuvo con Lázaro Cárdenas Batel, hijo de Cuauhtémoc Cárdenas, y actualmente con Leonel Godoy.

Con la derrota de su candidato en aquella entidad, al PRD sólo le queda como bastión único el Distrito Federal, en donde por como va la racha imparable del Revolucionario Institucional, podría recuperar la plaza más importante para el sol azteca la priísta Beatriz Paredes Rangel, quien está lista para rescatar políticamente para su partido la capital del país durante las elecciones de julio del año próximo, cuando desde ahora se da por hecho que Enrique Peña Nieto sacará al PAN de Los Pinos.

En cuanto al PAN, la aspiración de poder contender con la aplanadora priísta el año que viene, hará repensar a Calderón si de plano se lanza por promover una alianza PAN-PRD, en donde el candidato pudiera llegar a ser el jefe de gobierno capitalino, Marcelo Ebrard, ex priísta y dizque perredista, ya que ni Ernesto Cordero levanta, ni su candidata es Josefina Vázquez Mota  -quien perdiera a su principal apoyador en el accidente del viernes por la mañana, Blake Mora-, y menos el ex secretario de Gobernación, Santiago Creel, quien es gente de Martha Sahagún y Vicente Fox.

Otro escenario menos creíble es que Ebrard, al perder en las encuestas ante Andrés López Obrador, decida ser el coordinador de la campaña del tabasqueño, si éste lo acepta. De no ser así, la posibilidad de que el jefe de gobierno capitalino se anime a ir por la grande en alianza como candidato del albiazul y el sol azteca, sin duda no la descartaría.

Todo esto, en medio de la sombra de fatalidades que siguen persiguiendo al Presidente al perder el viernes pasado a otro de sus más cercanos colaboradores y amigo. Hacía tres años y siete días que había fallecido en un avionazo sucedido en la zona de Las Lomas de la ciudad de México quien fuera su delfín político, Juan Camilo Mouriño, que como titular de la política interior del país tenía, entre otras funciones a su cargo, igual que el funcionario tijuanense, acotar el avance de las mafias del narcotráfico que operan en el país.

En medio de su trágica circunstancia, Calderón tendrá que avocarse a buscar al quinto titular de Gobernación de su sexenio, después de haber pasado por ese cargo Francisco Ramírez Acuña, Juan Camilo Mouriño, Fernando Gómez Mont y su amigo ‘Blake’ como le decía al malogrado funcionario tijuanense. El jefe del Ejecutivo deberá determinar cual será su prioridad de cierre de sexenio -que sin duda seguirá siendo su guerra contra las mafias-, antes de ver el perfil del próximo huésped de Bucareli. Con toda la pena que lo embarga, esto lo habrá de decir probablemente esta misma semana.

Por ahora las autoridades aeronáuticas siguen dilucidando las causas del fatal evento que insisten en achacar al factor climatológico, aunque hay una versión surgida de parte de familiares directos de uno de los pilotos que conducían el aparato, en el sentido de que el helicóptero que se desplomó ya venía presentando algunas fallas desde antes de su fatal caída en un cerro del estado de México, lo que pudo haber provocado el desplome en pleno vuelo de la nave, lo que descartaría la hipótesis oficial de que un banco de nubes hubiese sido la causa de que el aparato se desviara y finalmente se estrellara.

pcardenascruz@yahoo.com.mx

Narcoguerra: Batea el PRI a Calderón

PAULINO CÁRDENAS

En una sesión más del ‘Diálogo por la Seguridad’ el titular del Ejecutivo, Felipe Calderón, insistió en el anhelo de su secretario de Seguridad Pública federal, Genaro García Luna, al señalar que el día en que México cuente con 32 policías estatales y una federal, así como ministerios públicos confiables y eficientes, “ese día estará derrotada la criminalidad”.

Si esa será la tónica hoy con los gobernadores del país –la mayoría priísta– y la representación de la jefatura de Gobierno del DF, la reunión podría acabar como el Rosario de Amozoc. Nadie querrá corresponsabilizarse de una guerra contra las mafias que ni siquiera les fue consultada. Excepto su partido, seguramente todos batearán las intenciones del presidente Calderón, como lo hizo Beatriz Paredes, la lideresa del PRI. O peor.

Por lo pronto la dirigente del partido tricolor no sólo bateó al presidente Calderón en su intención de reprocharle a las fuerzas políticas la falta de voluntad para sumarse a su guerra contra el narcotráfico que sin consultarle a nadie le declaró a las mafias organizadas desde que asumió el cargo en diciembre de 2006, sino de entrada le dijo que lo que se afirma se tiene que probar.

Le increpó que el debate sobre si el gobierno modifica o no su estrategia contra el crimen organizado, “no puede ser un debate maniqueo”, en el que se clasifique “a los buenos” como aquellos que sí quieren combatir al narcotráfico en los términos planteados por el gobierno federal, y “a los malos”, porque no quieren hacerlo siguiendo la ruta que ha tomado el mandatario panista.

Sin predicar con el ejemplo, el jefe del Ejecutivo había exigido a los partidos políticos “ideas claras y propuestas precisas” para mejorar la estrategia contra el crimen organizado. Demandó a los partidos políticos una «sólida y renovada voluntad política» para enfrentar al crimen organizado que representa un «verdadero desafío nacional» y dar cauce a las coincidencias sin renunciar a las diferencias.

Les pidió a sus dirigentes que con su capacidad de influencia, hagan lo que esté de su parte  para integrar una política de Estado, que les «es requerida» hoy por el país, «sin cálculos de vencedores y vencidos». Y enfatizó: «El enemigo son los criminales». Dijo que México está ante una oportunidad histórica de cambiar el destino del país en esta materia.

«Las diferencias no debilitan ni desprestigian a la política. Lo que daña profundamente a una nación es que la política no pueda trascender esas diferencias. Ha llegado el momento de dar cauce a nuestras coincidencias».El presidente dijo que quiere un México seguro y en paz.

«El diálogo no supone renunciar a las tesis que nos hace distintos ni sacrifica el juicio crítico sobre la realidad o sobre la acción de los gobiernos». Calderón reiteró ante líderes partidistas que debe ser una estrategia de Estado, no sólo del presidente, y que está abierto a modificarla y perfeccionarla.

Por su parte, Beatriz Paredes Rangel, manifestó su preocupación porque en lugar de resultados, este tipo de encuentros derive en escenarios construidos con fines mediáticos y electorales. Para los priístas, dijo, la política de seguridad nacional no debe ser tema de debate electoral.

En la reunión de ayer, el turno fue para los ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, en donde su presidente, Guillermo Ortíz Mayagoitia, dijo que en el sistema judicial no se encubre ninguna actuación ilegal o indebida, pues todas las denuncias son investigadas, y que de 2007 a la fecha en el Consejo de la Judicatura se ha sancionado, por faltas administrativas en diversos grados, a 42 jueces de distrito y magistrados de circuito.

Sin embargo, muchos mexicanos saben de la corrupción en la cadena procesal de la delincuencia empieza desde que se dan las aprehensiones. Lo cierto es que o falta coordinación o sobran los billetes –o las amenzas que muchas veces se cumplen– lo que da lugar a la vergonzante impunidad en el combate a las mafias organizadas contra un gobierno al que no se le ha visto muy organizado que digamos.

Cimbró AMLO a la izquierda sometida

PAULINO CÁRDENAS

Las declaraciones de Andrés Manuel López Obrador de que “voy a buscar la candidatura” para el 2012 con un partido que lo apoye, despertó de su letargo a la izquierda sometida. El primero en respingar fue el jefe de gobierno capitalino, Marcelo Ebrard, a quien ya le andan endulzando el oído para hacerle creer que podría llegar a ser el posible candidato de otra alianza ‘antinatura’ PAN-PRD para ser Presidente en el 2012, la misma fórmula de la desfondada derecha que con una izquierda urgida de una bocanada de oxígeno, ganó la gubernatura en  tres estados el pasado 4 de julio.

El triunfo fue paradójicamente con candidatos ex prístas como Gabino Cué en Oaxaca, Rafael Moreno Valle en Puebla y Mario López Valdez en Sinaloa; eso puso eufóricos a los dirigentes de la coalición ‘antinatura’ como les llamó el senador priísta Manlio Fabio Beltrones, quienes no paran de festejar  y, aunque lo nieguen, ya se corren apuestas de que repetirán la dosis para el 2011 y posiblemente para las presidenciales del 2012. Todo mundo sabe que esos partidos, si fueran solos, perderían.

Por ello el PRI anda preocupado. Con su candidato más adelantado, Enrique Peña Nieto, y  su partido satélite, al tricolor no le alcanzaría para ganar en el 2012, sin muchos votos del DF, y si PAN y PRD vuelven a jugársela en alianza para las elecciones presidenciales. Hay expectación por saber cómo irán estos dos partidos para los comicios del estado de México del año próximo, aunque todo mundo sospecha que repetirán la fórmula e irían nuevamente de la mano.

Si así fuera, y si como se comenta en los corrillos políticos Alejando Encinas fuera el candidato de esa alianza derecha-izquierda para competir por la gubernatura mexiquense, es probable que el triunfo le pudiera favorecer a esta coalición, lo que la pondría en ventaja de cara al 2012 y ya no habría dudas de que para las presidenciales irían juntos otra vez, para frenar la llegada del PRI a Los Pinos.

Una excepción sería Michoacán en 2011 donde podría surgir otro ensayo; se habla de que el PAN podría hacer migas con el PRI para designar a una sola opción como  alianza que quizá tenga nombre de mujer, y esa mujer podría ser la hermana de Felipe Calderón, Luisa María, ex diputada y ex senadora panista, a quien algunos llaman ‘la hermana incómoda’.

La declaración hecha la semana pasada por López Obrador no sólo turbó a Marcelo Ebrard y a la izquierda light que representa Jesús Ortega a quien ya le gustaron las alianzas ‘antinatura’, sino ya puso a pensar a la dirigencia del PAN y hasta del PRI en donde el tabasqueño tiene buenos amigos, empezando por la dirigente de este partido, Beatriz Paredes Rangel

Cuando todo mundo daba por muerto al tabasqueño, de pronto se autodestapó ya formalmente y dijo que lo anunciaba ‘de una vez’, porque, explicó, después de las elecciones presidenciales del 2006 quedó la impresión de que sólo existen el PRI y el PAN. En realidad quiso saber qué reacción tendría la izquierda, léase el PRD, al anunciar que sí va nuevamente en busca de la Presidencia para el 2012.

¿Si el perredismo y el jefe del gobierno capitalino no se doblegan a sus designios qué partido apostaría por su candidatura? Aunque el tabasqueño dice detestar al PRI-AN  como él les llama porque afirma que ambos partidos representan a la oligarquía y a la mafia del poder, paradójicamente de ahí podría salir el partido que lo apadrine para el 2012, porque el PRD prefirió ofrecerle al PAN-gobierno lo poco que le queda.

El anuncio de AMLO despertó de su letargo al PRD y a Ebrard a los que evidentemente agarró desprevenidos la decisión del tabasqueño de lanzar su candidatura para el 2012; además puso en alerta al PAN, en tanto que al PRI le abrió desde ahora la posibilidad de tener bateador designado en caso de que su estrella mexiquense, Enrique Peña Nieto, por alguna razón ajena a la política diga ‘zafo’ a la hora de las decisiones.

¿Cuánto durará su luna de miel?

PAULINO CÁRDENAS

La melosa ‘luna de miel’ que viven PAN y PRD y que sus dirigentes festejan con tanta fanfarria después de las elecciones del pasado 4 de julio, durará hasta que empiecen a decidir quiénes ocuparán los principales cargos de mando y decisiones, sobre todo los del manejo de los presupuestos en las entidades donde como aliados políticos ganaron. Como en los matrimonios, es ahí donde empezarán las verdades, a ver si eso también lo hacen público y lo festinan.

Aún así, los novios políticos ya andan haciendo planes para ir de la mano también en el 2011, para las elecciones en las que habrá cambio de gobernador, pero cuya principal mira de la pareja electorera está puesta en el estado de México, plaza considerada el bastión de oro del priísmo, que para muchos viene a ser la antesala de lo que pudiera suceder en las elecciones presidenciales a celebrarse el primer domingo de julio del 2012.

Todo comenzó el año pasado con la idea de ver cómo el PAN-gobierno convencía al PRI para que ayudara a aprobar en el Congreso las leyes de Ingresos y Egresos 2010, ya que ellos tenían la sartén por el mango en San Lázaro. Así, surgió la idea de suscribir un compromiso-trueque de pedirle ese apoyo a la dirigencia del tricolor, a cambio de no ir en alianza con ingún partudo en las elecciones del 2011 en el estado de México, específicamente con el PRD.

Con la venia de Los Pinos así se hizo, aprovechando el estado de ánimo del prísmo y su cúpula por su contundente triunfo electoral de mediados de año, que en una actitud de ‘perdonavidas’ accedió a hacer el trato, una audaz propuesta que muchos la consideraron sin lógica política. Incluso el senador priísta Manlio Fabio Beltrones, quien al parecer no fue convidado al acuerdo que se habría hecho en ‘lo oscurito’, cuando se enteró la calificó de ‘ antinatura’.

Esta consistía en suscribir el compromiso de cero alianzas del PAN con el PRD  para las elecciones del 2011 en el estado de México donde habrá relevo de gobierno, sabiendo sin duda que esa era desde entonces la intención con miras a no permitir otro descalabro tan contundente como el del 2009, con miras al 2012. Pero, ¿qué hacer con las elecciones que se avecinaban en el 2010? Ahí no había ningún compromiso suscrito.

Por ahí se fueron PAN y PRD ante el berrinche de muchos, entre ellos del propio secretaro de Gobernación Fernando Gómez Mont, que hasta a su militancia panista renunció cimbrando a la clase política del albiazul creyendo que vendría un cisma en el partido en el poder –y en el poder mismo–, que nunca se dio. Por ello se le tildó  al funcionario de estar a favor de Peña Nieto; hasta la fecha.

Nadie se explica de qué se valieron César Nava o el secretario Gómez Mont para haber convencido a Beatriz Paredes, con la amplia experiencia política que ésta tiene, para que firmara este convenio de ‘no’ hacer alianzas con el PRD para el 2011, a cambio de su colaboración legislativa; dicen que el arreglo fue empujado por el gobernador Peña Nieto. ¿Así habría sido?

El caso es que la ‘chamaqueada’ le salió cara a la dirigente priísta, porque no creía que los dos partidos que habían quedado desfundados en las elecciones intermedias del 2009 tendrían para levantar cabeza ni solos ni juntos, y hacer el milagro de ganar elecciones en coalición en los estados en los que acordaron ir de la mano este año. Pero, ¡Oh sopresa¡.

Después de los triunfos de la alianza PAN-PRD sus dirigentes ya hacen planes para ir de la mano nuevamente en los comicios del 2011 en el estado de México, aunque Acción Nacional rompa el supuesto acuerdo que habría suscrito en lo oscurito con el PRI. Eso empezó a causar escozor en la cúpula del partido tricolor y entre sus principales protagonistas, a quienes, si ya se les veía nerviosos antes del domingo, ahora se les ve, además, temerosos.

Recibe Calderón una cascada de críticas

PAULINO CÁRDENAS

El exhorto al diálogo para analizar alternativas y construir nuevas estrategias para el combate al crimen organizado propuesto por Felipe Calderón en dos mensajes consecutivos hechos con menos de 24 horas de diferencia, dieron la pauta para que recibiera una cascada de críticas.

El PRI y diversos actores políticos, incluído Andrés Manuel López Obrador, le hicieron al mandatario panista una serie de reproches y serios cuestionamientos que llegaron a lacerantes recordatorios por parte de la cúpula del tricolor sobre su toma de protesta como Presidente y su cuestionada legitimidad como ganador de la contienda electoral del 2006, cuyo triunfo presuntamente habría sido para el tabasqueño.

Los denuestos se dieron en el marco del luto que embarga a los priístas por la ejecución de su correligionario tamaulipeco Rodolfo Torre Cantú, aspirante a la gubernatura de su estado, acribillado junto con cuatro de sus colaboradores y dejando heridos a otros cuatros de sus colaboradores cuando un comando armado atacó al convoy donde viajaban rumbo al aeropuerto.

La cúpula prísta, en voz de su dirigente Beatriz Paredes, le dijo a Calderón el huevo y quien lo puso. Le reprocharon lo tardío del exhorto que hizo lunes y martes para resolver, juntos, todos los sectores de la sociedad y las fuerzas políticas del país, el reto que ha implicado el avance del poder del narcotráfico en México, cuyo combate ha resultado un evidente fracaso.

Las crónicas y comentarios políticos dieron cuenta promenorizada ayer mismo de la retahila de santos que trae colgados el mandatario panista, pero que la dirigente priísta, por si lo había olvidado le recordó, entre otras cosas que gracias al PRI no sólo había protestado como Presidente de la República en el Congreso, sino que ha podido rebasar la mitad de su administración sin tantos raspones políticos gracias a los apoyos que ha recibido del tricolor.

Le exigió un cambio en la estrategia de seguridad “y dejar de utilizar las instituciones con fines electorales para poder mejorar el ambiente político en el país” y desechar la guerra sucia y su política de querer ganar a cualquier costo, que es lo que han enturbiado el debate político y enrarecido el clima electoral que propició la muerte del candidato tamaulipeco y parte de su equipo de campaña la mañana del pasado lunes.

Que la democracia está en riesgo es ahora el tema. Se culpa a la inseguridad y a la violencia que ha generdo el combate al narcotráfico emprendido por Calderón, cuyos capos han reaccionado con furia ante el acoso de las fuerzas federales, mostrando ventaja en estrategias de combates sorpresivos y asaltos relámpago similares a los de la guerrilla urbana mostrando alto poder de fuego y actuando dispuestos a todo.

Calderón en su exhorto del lunes y martes, dijo que la división de los mexicanos es una vulnerabilidad que el crimen organizado aprovecha para actuar. Y lanzó la invitación para dialogar abiertamente con todos los sectores y las fuerzas políticas del país para discutir los nuevos senderos y estrategias para el combate al crimen organizado.

López Obrador manifestó que el llamado de Calderón es sólo para salir del paso porque ya fue rebasado por la realidad. Señaló que no es con reuniones ni con mensajes como se van a resolver las cosas. Recordó que nada ha hecho por la economía, por el empleo, ni por incetivar a las pequeñas empresas, por lo que el país se convirtió en exportador de mano de obra.

Para Calderón lo más preocupante es la inseguridad del país. A este respecto el tabasqueño comentó: Yo respondería al exhorto que hizo, pero si él se compromete a cambiar el rumbo del país, principalemente en la parte económica y del empleo.

Y si se asoma uno a las redes sociales, las críticas están peores. Señalan que el mandatario panista hizo un llamado tardío a que lo apoye la gente a la que ha tenido olvidada, para enfrentar un problema que él generó sin consultar a nadie. Incluso aglunos twiteros piden su renuncia.

Pugna divide a Legislativo del Ejecutivo

PAULINO CÁRDENAS

Hoy, después de los hechos sucedidos en la Cámara de Diputados, la relación entre el poder Legislativo y el Ejecutivo ha quedado más que maltrecha, dividida. Se da por hecho que a partir de ahora se verá, más que nunca, a un Ejecutivo con absoluta minoría al menos en la San Lázaro, cuando la bancada panista quiera empujar en el Congreso las reformas que mandó o que más adelante envíe el presidente Felipe Calderón para su análisis y aprobación  al Legislativo.

Ello, a causa del pleito arrabalero que han protagonizado las dirigencias del PAN y el PRI en la Cámara baja y que ha provocado un escándalo político nacional que, además de polarizar la división entre ambos partidos, pone en entredicho la posibilidad de que pudieran avanzar las diez iniciativas para reformar el sistema político que desde el pasado 15 de diciembre fueron enviadas al Congreso por el presidente Felipe Calderón.

Las discrepancias que acabaron en culpas e insultos mutuos entre los dirigentes del partido en el poder y el principal partido opositor por el famoso documento suscrito en la clandestinidad, en el que unos dicen que hubo compromisos más allá de lo escrito y  otros lo niegan, hacen asegurar que la alianza PRI-AN que todo mundo daba por hecho sería la dupla que caminaría junta en la segunda mitad del sexenio dizque para favorecer el interés general, pasó a  mejor vida.

Los dirigentes del PAN, César Nava, y del PRI, Beatriz Paredes, en su afán de querer cada cual defenderse como gato boca arriba de sus mutuas increpaciones, los llevó a hacer un papelazo en plena tribuna de San Lázaro que se convitió durante dos días en un circo,  retándose, insutándose e incluso prometiendo someterse, como si fueran presuntos delincuentes, a la prueba del polígrafo para ver quién miente, cuando todos los mexicanos saben que ambos son un par de embusteros.

Incluso el engallamiento del dirigente panista motivó que dijera en el Congreso que el secretario de Gobernación, Fernando Gómez Mont, “miente”, al afirmar que ese acuerdo firmado en la clandestinidad no incluía pacto alguno sobre el apoyo priísta a la propuesta presidencial sobre el paquete fiscal 2010.

Tildar de mentiroso a Gómez Mont podría encender los ánimos del funcionario quien, como su jefe,  es de ‘mecha corta’, ya que aquella frase que empleó cuando le hizo llegar su renuncia al PAN a ‘Don César’, de que no daba las razones de la misma ‘por discreción profesional’, para muchos es una salvedad que encierra otro peliagudo misterio.

¿Qué pasaría si de veras, como sospechan algunos, el secretario de Gobernación pudiera decidirse  a romper el secreto y sacar a la luz pública otro compromiso que pudiera haberse formalizado con otros protagonistas de la oposición? ¿Qué tal si en verdad existe otro compromiso hasta ahora guardado en secreto  –quizá no en términos escritos sino  hablados  y muy probablemente hasta grabados–, y en el cual habría quedado empeñada  la palabra de su jefe el Presidente, lo que, obviamente, de salir a la luz público, sería otro escandalazo?

¿Por ello  Gómez Mont prefirió, ‘por discreción profesional’, guardar la verdad, al menos por ahora? Decirle Nava mentiroso al secretario de Gobernación, más todo lo que se ha suscitado alrededor de ese vergonzoso capítulo de la vida política de México –capítulo que para Beatriz Paredes ya se cerró–, es un repudiable evento que ha dejado muy mal parado al presidente Felipe Calderón, de cara a la nación.

Por culpa de sus dos operadores que resultaron peor que el agua y el aceite, al Presidente le resultó fallido el experimento de querer hacer transitar en secreto a su partido en dos pistas, en una con el PRI y en otra con el PRD, lo cual por torpezas, celos y envidias internas, acabó en escándalo. Con ello,  la división de la otrora dupla PRI-AN, se reflejará muy pronto en el Congreso.

Estos sí son un peligro para México

PAULINO CÁRDENAS

La partidocracia en pleno que integran PAN, PRI y PRD, y los funcionarios del gobierno federal que han propiciado y protagonizado el escándalo político sobre el satanizado documento que ha dado pie al cisma político que no tiene para cuando amainar, se empeñan a allanarle el camino a Andrés Manuel López Obrador a quien en el 2006 le achacaba el PAN ser un peligro para México. Ahora resulta que los que son un peligro para México son otros.

Como todo mundo sabe, la historia comenzó con la renuncia el pasado 10 de febrero a su militancia panista del secretario de Gobernación, Fernando Gomez Mont, quien hizo pública su dimisión dirigida a ‘Don César’ (Nava), y en la que se reservaba las razones que lo habían llevado a tomar esa decisión, “por discreción profesional”.

Aquello causó un alboroto en la clase política y en la opinión pública que daba por hecho que algo grave había pasado entre el titular de la política interna del país, la dirigencia de Acción Nacional y el Presidente de la República. Comenzaba el cisma político.

Todo mundo creyó que, de la renuncia al PAN, Gómez Mont pasaría a resolverse por su dimisión al cargo de secretario, pero no fue así. Los periodistas quisieron saber de viva voz lo que había pasado, pero él, reacio como hasta ahora, se negó reiteradamente a decir bien a bien el por qué de su sorpresiva decisión.

Eso dio lugar a que se empezara a especular y a tratar de establecer los diversos posibles escenarios que pudieron haber motivado su dimisión partidista y lo que hubo atrás para que provocara el cisma a que dio lugar el intempestivo arrebato del titular de Gobernación. Y como en una batalla campal, empezó una riña de todos contra todos.

Primero privó la negación general del trasfondo. Ni Beatriz Paredes ni César Nava accedían a aceptar que hubiera habido algo atrás de esa renuncia. Fue el propio Gómez Mont quien a regañadientes empezó a soltar la sopa. Y enseguida empezó el jaloneo del ‘yo no fui fue Teté’ y algunas revelaciones de lo que había detrás de la colérica reacción del titular de Gobernación.

Fue el gobernador del estado de México, Erique Peña Nieto, quien se adelantó a asumir su parte y declarar que sí había habido arreglos con el PAN para no hacer alianzas con ningún partido, con mira a los comicios del 2011 en la entidad mexiquense en donde habrá elecciones para gobernador. Los personeros de Felipe Calderón habían sido Gómez Mont y César Nava. Por parte del PRI, su dirigente Beatriz Paredes y el secretario de gobierno mexiquense Luis Enrique Miranda.

Luego el turno correspondió a César Nava, dirigente del PAN, quien entregó el documento suscrito en lo oscurito por su contraparte del PRI, Betariz Paredes, con el secretario de Gobernación, Fernando Gómez Mont y con el mandatario mexiquense Enrique Peña Nieto a través de interpósita persona, su secretario de gobierno.

La dirigente nacional del PRI se encabritó y decidió ir a San Lázaro en su calidad de diputada a rasgarse las vestiduras el pasado martes e inmolarse políticamente al reconocer haber suscrito en la clandestinidad el famoso pacto que se ha vuelto un escándalo nacional. En una teatral actuación Beatriz Paredes explicó, palabras más palabras menos, que lo hizo por el bien de su partido, de la patria y de todos los mexicanos que la pueblan. Pocos le creyeron.

Ahora, como si fueran indiciados, Beatriz Paredes y César Nava estan dispuestos someterse a la prueba del polígrafo para determinar quién miente en torno al acuerdo anti alianzas que firmaron en octubre pasado. Invitan a que haga lo mismo el presidente Felipe Calderón. Por otro lado, Nava reta a su homóloga del PRI y al gobernador Peña Nieto a un debate. Más lo que se vaya acumulando.

Como sea, todos –panistas, priístas y perredistas– parecen empeñados a allanarle el camino a Andrés Manuel López Obrador en la abierta carrera presidencial del 2012 que ya empezó de forma bastante violenta, si esta vez al tabasqueño no le vuelve a ganar la soberbia y la arrogancia que le hizo perder la Presidencia en el 2006.

Que renuncien mentirosos y omisos

PAULINO CÁRDENAS

Tras el nuevo y vergonzante episodio en la vida política de México, prácticamente en todos los sectores de la sociedad existe la convicción de que al menos los dirigentes del PAN, César Nava, del PRI, Beatriz Paredes, y el titular de Gobernación, Fernando Gómez Mont, deberían presentar su renuncia, junto con la del dirigente perredista Jesús Ortega, antes de que se descompongan más las cosas en vísperas de las campañas políticas que se avecinan.

También se señala que el presidente Felipe Calderón debería explicar de cara a la nación su doble propósito de haber querido negociar por una parte con el PRI y por otra con el PRD, uno, para lograr la aprobación del paquete fiscal que había propuesto al Congreso y dos, para evitar que la aplanadora del PRI vuelva a hacer cisco las aspiraciones electorales panistas en los comicios de este año, en un experimiento que al final le resultó fallido.

Por todo ello, el sentir de la gente en todo el país ha hecho recordar aquella propuesta del empresario Alejandro Martí, padre del menor secuestrado y asesinado, Fernando Martí, quien en agosto de 2008 exigió en Palacio Nacional a los funcionarios encargados del cumplimiento de la seguridad: «si no pueden, renuncien».

Después del campal embarradero que acabó haciéndose público, quedó de manifiesto  lo que insistentemente se había negado, al aceptarse que sí hubo trueque entre el PAN y el PRI, de cambiar el apoyo de este partido al blanquiazul para incrementar los impuestos a los mexicanos, porque no hubiera alianzas en el Estado de México para las elecciones de gobernador del año venidero, con lo que el PRI quería asegurar el triunfo en esa entidad, en vísperas del año de elecciones presidenciales.

En ese arreglo suscribieron un documento Nava y Paredes, y como ‘testigos de honor’ los secretarios del gobierno federal, Fernando Gómez Mont, y del estado de México, Luis Enrique Miranda Nava, un acuerdo que evidenció la pretensión de un claro blindaje a Enrique Peña Nieto, por parte de PAN.

Por presiones externas más que por convencimiento propio, Gómez Mont decidió el pasado viernes dar una conferencia de prensa en la que se creyó que anunciaría su renuncia como titular de Gobernación, pero no fue así. En ella no dijo nada nuevo y sólo aprovechó para mostrar una vez más su hosco carácter con los periodistas. Por lo demás, el funcionario continuó siendo omiso. ¿Para qué fue la conferencia? Nadie supo.

Según el responsable de la política interior de México,  él no tiene por qué informarle de todo lo que hace a su jefe el Presidente, menos si se trata de negociaciones en lo oscurito con legisladores y gobernadores priístas, excepto si truena el cuete, como tronó. Insistió que ignoraba que Nava cumplía otra encomienda presidencial con la dirigencia perredista para hacer alianzas con miras a los comicios de este año. No explicó por qué cuando se enteró, prefirió separarse de su partido, pero no del cargo en Gobernación.

Para muchos, las mentiras de la dirigencia del PAN y del PRI, y las omisiones del titular de Gobernación, ameritan hacer válida aquella propuesta de Martí de  “si no pueden, renuncien”. Mejor aún si a esa dimisión se sumara el sumiso dirigente del PRD, Jesús Ortega, quien escogió el camino fácil de cobijarse bajo la sombra del panismo con miras a los próximos comicios, después de que ese partido venía tildando a Felipe Calderón de ‘Presidente espurio’ desde 2006.

Lo del secretario de Gobernación, junto con la encomienda presidencial a Nava para hacer alianzas con los perredistas, fue un experimento con doble propósito del huésped de Los Pinos, que al final le resultó fallido. Todo mundo cree que al mandatario panista le saldrá más caro el caldo que las albóndigas. Se asegura que esto se reflejará primero en el Congreso, y más adelante en las urnas.

Por Nava reculó el PRI

PAULINO CÁRDENAS

Por seguir el estilo de su antecesor, el diriente del PAN, César Nava, echó a perder los acuerdos y componendas a las que habían llegado el miércoles los legisladores del PRI con los del partido en el poder sobre el paquete fiscal enviado por el Ejecutivo Federal al Congreso y que ciertamente a nadie convenció, el cual había sido aprobado la madrugada de ese mismo día, con algunas adecuaciones respecto de como había llegado la propuesta a la Cámara de Diputados el pasado 8 de septiembre.

La evidente inexperiencia política mostrada por el dirigente panista causó escozor entre los priístas, por su falta de sensibilidad. Su imprudencia verbal al criticar desde el mismo miércoles al PRI señalando que ese partido ‘es corresponsable del rumbo de la economía del país y de la definición de la política de gasto, por ser mayoría en la Cámara de Diputados’, enervó los ánimos del principal partido de oposición y echó para abajo las aprobaciones  que se daban ya como buenas.

El dirigente del PAN lamentó que el tricolor haya rechazado el impuesto al consumo de 2%, cuyos montos serían dedicados a combatir la pobreza. “Este es el defecto de la propuesta aprobada esta madrugada (del miércoles) en la Cámara de Diputados, que los recursos que arrojará esta contribución de 16% del IVA no estarán destinados específicamente al combate a la pobreza”, pretexto usado como bandera para su aprobación, que a nadie convenció.

Dijo que la propuesta del jefe del Ejecuivo claramente manifestaba y presentaba la etiqueta de estos recursos adicionales a los programas de combate a la pobreza. Dicho de otro modo, a César Nava le pareció mal que los priístas no se hubieran plegado a la propuesta de Felipe Calderón, por lo que se le hizo fácil, igual que lo hacía su antecesor Germán Martínez, soltar la lengua y despotricar contra los priístas, lo que le mereció que éstos lo pusieran en su lugar.

Eso motivó que los principales jerarcas priístas -tanto de quienes formalmente dirigen ese partido como los que más influyen con sus decisiones tras bambalinas- amenazaran con que en el Senado de la República el famoso paquete fiscal sufriría una revisión exhaustiva. Ayer mismo, la crema y nata del tricolor entre su dirigencia, sus 19 gobernadores y sus legisladores en ambas cámaras, comenzaron a deliberar sobre el paquete fiscal, pero el del PRI.

Los imprudentes comentarios de César Nava, sin duda hechos con la anuencia de su apoderado en Los Pinos, le merecieron una serie de improperios por parte de los priístas, que lo llenaron de feos calificativos como los de ‘ignorante y perverso’ que le endilgó el coordinador del PRI en la Cámara de Diputados, Francisco Rojas, o los de “chamaquito cobarde, rajón e irresponsable” que le sorrajó el también legislador priísta David Penchyna.

La dirigente del PRI, Beatriz Paredes, no se quedó atrás y acusó al imberbe dirigente panista, de actuar con «oportunismo electoral”. Dijo que es muy grave que el partido en el gobierno pretenda deslindarse de su responsabilidad. “Sus declaraciones son inoportunas, con un claro cariz electorero” y rechazó categóricamente su manipulación y oportunismo.

La insolencia política de Nava le puso en bandeja de plata al PRI, la oportunidad de reivindicarse frente a los mexicanos que habían sentido los acuerdos a los que llegaron en lo oscurito con los panistas en la Cámara de Diputados, como una traición al voto de confianza que le habían otorgado al tricolor, tanto en las pasadas elecciones intermedias de julio, como en las más recientes de octubre.

Ayer trascendió que el paquete fiscal enviado por Ejecutivo Federal al Congreso podría  sufrir significativas modificaciones y que se regresaría al proyecto del paquete económico que proponía el PRI, el cual dizque no afectaría con más impuestos a los constreñidos mexicanos que sufren tanto agobio económico. Los más pícaros apuestan a que las necedades del PAN-gobierno sobre el paquete fiscal 2010 serán muy bien aprovechadas por el PRI, para llevar agua a su molino rumbo al 2012. Y aún falta el Presupuesto de Egresos.

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