PAULINO CÁRDENAS
En su carta de renuncia al PAN el miércoles pasado, el secretario de Gobernación, Fernando Gómez Mont, prefirió no dar a conocer, “por discreción profesional”, las causas por las cuales se separó de su partido. Pero el viernes, forzado por las circunstancias de su propio silencio, declaró que ‘mientras forme parte del gabinete federal’ trabajará por la agenda política en la mayor confianza posible.
En el Instituto de Investigaciones Jurídicas de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), Gómez Mont dijo a los periodistas: “El presidente Felipe Calderón Hinojosa y yo tenemos una comunicación constante; él y yo manejamos nuestros puntos de vista. Él es el Presidente y yo el secretario de Gobernación; yo le sirvo al Presidente”.
Habló pero nada explicó de las causas de su renuncia al PAN. Y entre tantas versiones que han surgido aquí y allá ante su negativa de no revelar las verdaderas causas de su ida del PAN, hay una que ha llamado la atención.
Se trata de un mensaje de texto enviado por el Presidente a Gómez Mont durante el Foro de consulta sobre la Reforma Política que organizó el Senado. En su última edición, Reporte Índigo (Un gobierno que se divide) da cuenta de ello, basado en una información del miércoles 10 de febrero aparecida en la columna de Marcela Gómez Salce en el periódico Milenio.
Comenta el reportaje que al iniciar el foro aquel lunes 25 de enero, Manlio Fabio Beltrones habría cuestionado las formas de enviar una iniciativa presidencial sin previo consenso con los legisladores. La censura fue fuerte, pero institucional. Cuando Gómez Mont tomó la palabra, se lanzó directo contra el senador priista, con quien por cierto lleva una sólida relación. La concurrencia se sorprendió por el tono inusual de quien debía ser el conciliador nacional.
Al terminar el evento –sigue la información–, Gómez Mont se habría acercado a Beltrones intentando una explicación. Y esa habría salido de la Blackberry del inquilino de Bucareli, donde un mensaje enviado por Felipe Calderón decía: “¡Rómpele la madre!”. Era una clara alusión presidencial al discurso de Beltrones, y el secretario de Gobernación obedeció.
Pero el hecho de mostrar el mensaje al priista habría dejado en claro que prefería quedar bien con la oposición que con su jefe, el Presidente, quien quedaba exhibido. La frase fue demoledora y la misma no ha sido negada. Por tanto, es cierta, lo que dice mucho del estilo personal de reaccionar del Presidente. Hasta aquí la nota.
Ese ‘Rómpele la madre’ contra Beltrones se traducirá, y pronto, en el ahondamiento en las diferencias entre el PRI y el PAN-gobierno, cuyo craquelamiento se empezó a generalizar más con el reciente anuncio de las famosas alianzas, con las que el propio secretario de Gobernación mostró su desacuerdo.
Será en el Senado de la República y en la Cámara de Diputados en donde se empiecen a refejar esos resquemores y diferencias. Quienes más influyen en el tricolor –legisladores y gobernadores– en sus decisiones y acuerdos políticos con otras bancadas, andan que no los calienta ni el sol por la serie de pactos incumplidos por parte del PAN-gobierno, sobre todo de quien en los hechos dirige al blanquiazul desde Los Pinos.
La dimisión de Gómez Mont al PAN ha sido aplaudida por el PRI, por lo que ahora el principal funcionario del gabinete de Felipe Calderón es señalado como neopriísta. Y por ese neopriísmo su jefe podría dejar de prescindir de sus servicios. Sobre su salida ya empezaron las apuestas.
El ‘Rómpele la madre’ que le instruyó hacer el Presidente en la tribuna contra Beltrones en aquel foro, y el que el ex panista haya querido justificar su revire con éste en la tribuna al mostrarle el mensaje que se leía en su Blackberry, lo dice todo. Ya hasta andan apuntando nombres para sustituirlo en Bucareli: Juan Molinar Horcasitas, Josefina Vázquez Mota y hasta Rodolfo Elizondo.
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